martes, 19 de mayo de 2009

DEFRAUDADA


La primera vez que me engañes, la culpa será tuya. La segunda, la culpa será mía”
(Proverbio árabe)


¿Por qué permitimos que un amigo nos defraude?,
¿por qué nos permitimos el lujo de tener un mal amigo?,
¿es amigo aquel que una y otra vez te regala su indiferencia?,

Los últimos días han vuelto a ser de desilusión, y no porque no supiera lo que estaba sucediendo si no porque una vez más la confirmación de otro engaño, me ha dolido.

Cuando he leído este proverbio, lo he relacionado instantáneamente .. ¿es culpa mía?, si. Pero por otro lado, ¿por qué debo ser yo la culpable?

Por volver cada vez a escribir?
Por estar ahí cuando me necesita?
Por decir palabras sinceras de total apoyo?
Por intentar ser una buena amiga?

Hace mucho tiempo que me empeñé en dejarle muy claro que no era mi amigo, simplemente un conocido con quien hablar…. Pero entonces… ¿por qué me afecta tanto?

Siempre me ha repetido que soy una buena amiga y siempre me ha demostrado que no me considera así. Como un excelente político sus palabras convencen pero sus acciones demuestran que miente.

En mis peores crisis nunca tuvo tiempo. Tan solo cuando me ha necesitado le he tenido… después el olvido….

Me molesta su indiferencia, me molesta sus engaños, me molesta que sea tan idiota que no se de cuenta que no hay dos como yo, que sé escuchar y me culpo siempre de los errores de los demás…. Me molesta que siempre me haga sentir culpable por ser buena amiga.

En esta vida..unos vienen y otros van y quien menos te lo esperas se termina marchando...